MANIFIESTO POR EL AGUA PÚBLICA EN BARBATE

En nuestra jornada sobre el agua que tendrá lugar mañana sábado 28 de marzo, nos proponemos leer el siguiente manifiesto que esperamos que reciba el apoyo de ciudadanos y ciudadanas a título particular y colectivos sociales de Barbate, por lo que lo sometemos a la consideración de todos:

MANIFIESTO POR EL AGUA PÚBLICA EN BARBATE

El Ayuntamiento de Barbate adjudicó en 2012 el servicio de gestión del ciclo integral del agua a la empresa Aqualia hasta 2037.

La ciudadanía desconoce si la empresa concesionaria ha presentado un Plan Director de los servicios de abastecimiento, saneamiento y depuración, tal como le obligaba el pliego de cláusulas administrativas, pero las mejoras en el servicio en estos años lejos de poder observarse, permanecen ajenas a la realidad.

El equipo de gobierno municipal, en todo caso, se rindió a la limosna de 2.500.000 Euros en los dos primeros años sin percibir más cantidades en los siguientes ocho.

Hasta el undécimo año de concesión el Ayuntamiento no volverá a recibir cantidad alguna en concepto de canon variable por consumo y ello pese a que la ciudadanía continuará abonando cantidades en sus recibos durante estos años.

A cambio de este singular acuerdo, la empresa concesionaria se comprometía a ejecutar obras durante los seis primeros años de la concesión por importe de 150.000 Euros el primer año y 400.000 Euros en cada uno de los siguientes cinco, dedicadas especialmente a mantener las playas en condiciones de salubridad adecuada para su uso.

Es patente que en estos años ni las playas han alcanzado un nivel de salubridad que permita honradamente decir que están en condiciones, ni la mera observación de la realidad permite adivinar que las inversiones anuales superen los 400.000 Euros.

Nos tememos que lo que el Ayuntamiento ha pretendido, es justificar la ausencia de inversiones afirmando que se ha construido un emisario submarino en la zona de la playa de los militares, el cual tampoco es una realidad, sino un vertedero de aguas fecales al mar contaminando las playas de Barbate y Zahara.

Todas estas actuaciones encubren una clara tomadura de pelo a la ciudadanía barbateña, harta de pagar a precio de oro por un servicio absolutamente deplorable.

No somos nosotros los que lo decimos, sino que el propio Ayuntamiento reconoce en el Pliego de Cláusulas Administrativas que en el casco urbano de Barbate “hay tramos de red con bastante antigüedad, presencias de redes en mal estado general, con tramos de fundición gris con deficiente calidad en las uniones y tuberías de fibrocemento de elevada antigüedad (que) presentan problemas derivados del mal estado de conservación consecuencia de su antigüedad y del mal estado de las juntas Gibault. Por motivos medioambientales este tipo de material no se utiliza, desde hace varios años, en las nuevas actuaciones de urbanización, ya que se han demostrado los problemas ambientales que produce el amianto…”.

Sin embargo, en estos años no se han constatado obras de la suficiente envergadura que permitan pensar que estas deficiencias han sido resueltas.

Mientras, los barbateños y barbateñas pagan el agua a precios desorbitados, sin tener ni un sistema de suministro en condiciones, ni un sistema de depuración que pueda entenderse como tal, sin presión durante varias horas al día, con modificaciones en los calibres de suministro, etc, fijándose el mínimo del recibo en torno a 25 Euros sin consumo.

Es hora de revertir esta situación.

La gestión pública del agua permite la realización de inversiones que el sector privado no pone en marcha y, en algunos casos, como el de la zona metropolitana de París, que las facturas hayan podido reducirse un 8 % de media anualmente.

Existen fórmulas legales para hacer que el servicio revierta a manos públicas, habiendo estado privatizado en nuestro pueblo desde que recuerda la memoria de los barbateños y barbateñas allá por los años noventa.

No nos resignamos a reclamar en su momento el rescate del servicio para hacerlo público, porque sólo esa garantía es la que permitiría pensar que en nuestro pueblo se depuren adecuadamente las aguas residuales, se ejecuten obras de saneamiento y reforma de las redes defectuosas de tuberías suministradoras y se rebajen las facturas de agua de modo sustancial.

Según la Ley es preceptivo abonar a la concesionaria el importe de las inversiones realizadas por razón de la construcción y adquisición de bienes que sean necesarios para la explotación de la concesión, así como indemnizarle por los eventuales beneficios futuros que el concesionario dejare de percibir atendiendo a los resultados del último quinquenio.

Pero también se puede resolver el contrato si la concesionaria no presta el servicio en debidas condiciones o no acomete los compromisos adquiridos en materia de inversiones.

Aparte de la Ley la presión ciudadana es esencial para este objetivo.

Llamamos a los barbateños y barbateñas a pelear por lograrlo, porque nadie mejor que el pueblo puede gestionar lo que es del pueblo, nadie mejor que los ciudadanos y ciudadanas de Barbate pueden hacer posible revertir esta situación.

En la mochila irá conseguir los mínimos vitales de agua que perseguimos, la rebaja sustancial de la factura, la atención a los colectivos más desfavorecidos con mayores rebajas y una adecuada política de inversiones que nos permitan tener una depuración plena de nuestras aguas residuales, unas tuberías que impidan la contaminación de las aguas de consumo humano y un medio ambiente protegido.

A esos objetivos llamamos a todos los barbateños y barbateñas.